El 22 de abril del 2014, ante la denuncia de las autoridades comunales, la DISA Jaén realizó un monitoreo de agua del río Chirinos, enviando las muestras a la DIRESA Lima, cuyos resultados reflejan la presencia de algunos metales por encima de los límites máximos permisibles para la categoría de agua de consumo poblacional y recreacional, como son el aluminio y el hierro, sin embargo, estos elementos se encuentran generalmente en aguas superficiales y no son considerados elementos altamente tóxicos.

Como las muertes de peces seguían produciéndose, la comunidad volvió a alertar a las autoridades sobre la problemática, por ello, el 23 de octubre del 2014, autoridades y representantes de instituciones de la Provincia de San lgnacio y representantes de las comunidades Nativas de Naranjos y Supayacu, reunidos en la ciudad de San Ignacio, establecieron una serie de compromisos para desarrollar un trabajo de Monitoreo Participativo de Calidad de Agua del río Chirinos, el cual estaría a cargo de la Autoridad Nacional del Agua.

Tres días antes de dar inicio al monitoreo, la ANA declaró desierto el proceso de licitación para la contratación del servicio de análisis de laboratorio, suspendiéndose la inspección de monitoreo del río Chirinos por parte de la ANA.

Es por ello que, a solicitud de la Comunidad Nativa de Supayaku, un equipo de la RED MUQUI, conformado por algunas de sus instituciones miembro como son: Asociación Marianista de Acción Social - AMAS, GRUFIDES y la Vicaría del Medio Ambiente de Jaén, llevaron a cabo un monitoreo independiente de las aguas del río Chirinos con fecha 28 de noviembre del 2014.  

El análisis de las muestras de agua fue realizado en un Laboratorio de Lima acreditado por INDECOPI y los resultados de dicho monitoreo han sido analizados por el Laboratorio Regional de Agua del Gobierno Regional de Cajamarca.

El informe del Laboratorio alerta la presencia en la muestra de Nitrógeno amoniacal, fenoles, aceites y grasas, los cuales sobrepasan los límites establecidos en los Estándares de Calidad Ambiental (ECAs).

Según el informe del Laboratorio Regional, la presencia de estos compuestos indica la existencia de alguna fuente de contaminación aguas arriba, ya que no son elementos que se encuentren comúnmente en el agua, sino que se derivan de productos sintéticos procedentes de actividades industriales. Así mismo, se manifiesta que estos parámetros pueden haber sufrido descomposición natural y biológica y que, en algún momento, los valores pudieron ser mayores a los encontrados. Finalmente, el informe asegura que el nitrógeno amoniacal, fenoles, aceites y grasas, resultan tóxicos para los peces y otros organismos acuáticos.

Se concluye que la exploración minera desarrollada por la empresa Águila Dorada en la cabecera de cuenca del Río Chirinos, podría estar vertiendo aceites usados y compuestos sintéticos industriales al agua, con alto efecto contaminante que ha generado la muerte de peces y, como consecuencia, la afectación de la comunidad en su salud y alimentación.

Actualmente, la empresa ha paralizado sus operaciones, pero la problemática generada con la contaminación del agua es un llamado de atención a las autoridades y a la Comunidad Nativa de Naranjos, en cuyo territorio se encuentra la exploración minera. De continuar la empresa su actividad, podría agravarse la crisis alimentaria y de salud para estas comunidades, tan dependientes de los recursos y estrechamente vinculados con los territorios heredados por sus ancestros.